Aprueban construcción de megaparque eólico en la isla de Chiloé 

[Giant wind farm approved on Chiloé island]

La iniciativa representa una inversión privada de US$ 235 millones y será capaz de generar 112 Mw de potencia.

Como la mayor inversión privada que ha llegado a la isla en la historia de Chiloé. Así describió el intendente de Los Lagos, Juan Sebastián Montes, el impacto de la aprobación del megaproyecto Parque Eólico Chiloé, que pretende instalar turbinas capaces de generar 112 Mw de energía.

La iniciativa propuesta por la empresa Ecopower contempla una inversión de US$ 235 millones y se instalará en una superficie de 1.000 hectáreas en el sector Mar Brava, en la bahía de Cocotué, Ancud.

El parque eólico Chiloé se sumará al proyecto San Pedro -ubicado en Dalcahue-, que también producirá energía limpia y renovable en la isla. El intendente de Los Lagos explicó que la aprobación ambiental de ambos proyectos hará que Chiloé triplique la demanda de energía que necesita la isla. “Chiloé se convertirá en un exportador de energía y no en un importador de energía del continente”, dijo Montes. La energía producida será parte del Sistema Interconectado Central.

Para la ejecución del proyecto se requerirá la mano de obra de 100 trabajadores y se estima que la vida útil del proyecto es de 25 años. Tras la aprobación hecha por el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA), la empresa espera comenzar a ejecutar la iniciativa en el primer trimestre del próximo año.

Controversia

Pese a que el proyecto tuvo el respaldo unánime de los integrantes de la comisión evaluadora del SEA de Los Lagos, durante la sesión del lunes, representantes de la comunidad, así como ONG presentaron fuertes reparos al proyecto.

Gisela Saldivia, vocera de los críticos al parque eólico, aseguró que existen, al menos, tres aspectos que no fueron considerados. El primero se refiere a la presencia de comunidades huillinches en las cercanías del parque, a quienes no se les consultó por el impacto de las torres, contraviniendo el artículo 169 de la OIT. Agregó que se temen impactos negativos sobre la extracción de machas. Asimismo, dijo que estarían en peligro al menos 14 sitios arqueológicos -uno de ellos de hasta 6.000 años de antigüedad- que existen en la zona. Otras organizaciones llamaron la atención sobre el posible daño que generarían las vibraciones de las torres a las ballenas que llegan a la zona.

El intendente Montes dijo que Ecopower se comprometió “de forma voluntaria” a tomar las medidas necesarias para evitar cualquier daño. Agregó que por ley este proyecto requirió de una Declaración de Impacto Ambiental y no de un estudio completo, ya que el proyecto no está en un área sensible, es decir, no hay asentamientos humanos mayores ni es un área protegida.

Julio Albarrán, gerente de Ecopower, afirmó que se creará una fundación que velará por el cuidado y mantención de los sitos arqueológicos. Agregó que tendrán un monitoreo sobre la avifauna del lugar y que estudios han descartado algún impacto sobre la extracción de las machas. El ejecutivo dijo que las torres estarán a 150 metros sobre la línea de alta marea, por lo que tampoco habría un daño sobre los cetáceos.